el tiempo y la distancia a veces sanan. otras veces erosionan. eso si, el tiempo no tiene nada que ver en hacer un amor mas o menos intenso. caimos en un juego del destino que nos desbarató el olvido logrado con tanta lucha, se burló de el. fue bonito soñar, ilusionarse y refugiarnos de lo que somos ahora a los 30 con lo que fuimos alguna vez a los 20. pero la realidad siempre parece ganar, y no te culpo, tal vez yo ya he exorcisado mucho mas que tu el sentimiento de culpa o mas cierto aun es que tu tienes un amor mucho menos vanal que el romantico por el que sacrificarlo todo por ahora. fue imposible no sentir que te perdia de nuevo y que ahora tu me dejabas como yo te deje hace varios años. pero estuvo bien, y yo te entiendo, y si tienen que pasar otros diez años pues habra que dejarse al destino nuevamente. por ahora yo dejo de esperar y me centro en la punta de mi nariz que es lo unico que puedo ver claro y asi estoy bien, al parecer tengo otra fuerza ahora.