estas mujeres no tienen casa pero se arreglan bonito. llevan el pelo pintado, la sonrisa picada pero los labios decorados, rojos y lilas sobre las arrugas que no podemos saber si son hijas de la edad o de la exposicion continua a la intemperie. a muchas la voz se les ha vuelto como de lata, por los cigarros o tambien puede ser a causa de las medicinas de hospitales mentales donde tambien suelen refugirse o mas bien el mundo se refugia de ellas. a veces duermen en las sillas, sobre todo en invierno cuando las camas escasean. llegan tempranito, comen, se arreglan, y esperan. quieren conversar con las compañeras, con las trabajadoras sociales, con las monjas, con quien sea que pase. para contarles que les paso, y que les dejo de pasar. otra mañana. y al menos algunas conocidas regrezan. las otras, sabe dios por donde andaran.