Estoy frente a un abismo. Tengo dentro de mi una semilla que no quiero tener. Quisiera poder plantar otra lejos del abismo, dejarla crecer, poderla querer. Quisiera poder ser otra que no tiende tanto a situarse al lado del abismo. Tanto. A pesar de que busco consuelo y apoyo, en esto estoy tan pero tan sola. I’m so fucked up, so fucked up man. Porque tengo la peor de las suertes y porque tal vez lo hice a propósito esto de ubicarme al borde del abismo como para entonces reaccionar, despertar y saber que la única salida es continuar con el secreto individual, que debo mutilarme el producto de un amor de locos que tal vez debo culminar ya de una vez por todas así como con mi locura. Que debo calmar las aguas de mi vida. Pienso que si volviera mi barco perdido y su horizonte podría entonces despertar calmada, sabia y entonces estaría dispuesta a dejar crecer semillas de amor dentro de mí. Pero qué si mi barco se perdió para siempre. Debo ser valiente, debo sobrellevar con fuerza de hembra la mutilación dentro de mi, el corazón retorcido, el secreto y la mentira, el ser mujer, el ser loca suicida, lo que duele querer. Las pruebas que nos pone la vida y que finalmente nos hace mas fuertes.